George Edwards (1694-1773)

Considerado el padre de la ornitología británica, este naturalista destacó por ser autor de cientos de dibujos a color de aves y otros animales que plasmó en magníficos grabados calcográficos. Tras viajar por Europa, en 1733 fue nombrado bibliotecario del Royal College of Physicians de Londres gracias a la mediación de su amigo y mecenas, Sir Hans Sloane, director del British Museum, para el que realizaba ilustraciones.

 

Desde este puesto de bibliotecario, Edwards se esmera en llevar a cabo su obra magna, empeñado en lograr unas representaciones realistas de las especies de aves que apenas habían sido figuradas en trabajos anteriores. Para ello, Edwards utiliza mayoritariamente especímenes disecados, aunque también realiza dibujos directamente sobre ejemplares exóticos que traen los barcos al puerto de Londres. Además, introduce a cada especie en un paisaje que considera acorde con su hábitat. 

 

Con ayuda de Mark Catesby para realizar las planchas de grabado, Edwards llevó a cabo y supervisó tanto el proceso de grabado como la aplicación de color a las láminas estampadas, ya que le resultaba de extrema importancia que se ciñeran a los colores reales de cada especie. Para ello depositó una copia de sus dibujos en la biblioteca en la que trabajaba para que sirviera como referencia cromática en el futuro.  

 

Entre 1743 y 1751 se editaron los cuatro volúmenes de la monumental A Natural History of Uncommon Birds, and of Some Other Rare and Undescribed Animals, una de las publicaciones más importantes de la historia natural del siglo XVIII. En ellos se ilustran más de 300 especies de aves a través de aguafuertes a plena página, la mayoría sobre dibujos del propio Edwards, aunque también de Peter Paillou (ca. 1720 – ca. 1790). Muchas de estas ilustraciones serán copiadas por Seligmann en Alemania para su obra Sammlung verschiedener ausländischer und seltener Vögel, de 1749.

 

Posteriormente, Edwards publica otros tres volúmenes complementarios titulados Gleanings of Natural History (1758, 1760 y 1764), con 152 láminas grabadas en las que se figuran mamíferos, reptiles, aves, insectos o plantas escasamente descritos y representados hasta el momento. 

 

A partir de 1764 Edwards se retira a un pequeño pueblo de Essex, donde morirá en 1773. Sus últimos trabajos fueron Essays upon Natural History (1770) y póstumamente Elements of Fossilogy (1776), ambos sin ilustraciones.